Encarnación Capilla i Isabel Navarro «Intentamos mejorar la sostenibilidad de los piensos para peces»
En los últimos años, la expansión de la industria de la acuicultura ha implicado una elevada demanda de ingredientes alternativos a la harina y el aceite de pescado para los alimentos de los peces. Actualmente, existe también un interés creciente en el uso de compuestos bioactivos con propiedades beneficiosas como aditivos alimentarios para mejorar las dietas de sustitución y hacerlas más sostenibles. Para probar estos aditivos, las empresas de producción deben realizar ensayos de crecimiento in vivo que pueden ser largos y costosos.
A través de la ayuda Proba de Concepto recibida en 2021, las doctoras Encarnación Capilla e Isabel Navarro, profesoras de la Facultad de Biología de la Universidad de Barcelona, están desarrollando con modelos de cultivo primario de células de peces, una herramienta de cribado eficiente para probar los efectos directos de los posibles aditivos.
Su objetivo es proporcionar al mercado un paquete tecnológico de herramientas in vitro que permitirá testar muchos productos para realizar una preselección de compuestos, con bajos gastos en animales, instalaciones y tiempo.
¿En qué consiste el proyecto en el que estáis trabajando?
Estamos trabajando en la búsqueda de nuevos ingredientes y aditivos que permitan mejorar la salud y calidad de los peces de la industria de la acuicultura y que puedan ser también beneficiosos para el consumidor. Nosotros podemos testar muchos productos al mismo tiempo para dar información sobre los que pueden ser más adecuados para las empresas. Somos un grupo de investigación que llevamos muchos años dedicándonos al campo de la acuicultura y trabajamos en optimizar el crecimiento, la nutrición y el metabolismo de estos animales.
¿Cómo se consigue ahorrar tiempo y dinero a los productores de pienso con este sistema in vitro de cultivos celulares que estáis desarrollando?
Nuestro proyecto ofrece un sistema de cultivos celulares para testar estos productos de forma mucho más rápida y económica, con la ventaja de que podemos evaluar muchos productos a la vez y probar diferentes combinaciones e interacciones. Trabajamos con cultivos de células que son de las mismas especies que se cultivan en la acuicultura; por tanto, están muy cerca de la fisiología del pez. El sistema que aplicamos es innovador porque ahorra tiempo y dinero a los productores de piensos y aditivos.
¿Cuáles son los aspectos diferenciales de vuestro proyecto?
Un aspecto remarcable es que trabajamos con diferentes tipos celulares que provienen del tejido adiposo, el músculo, el hígado o el hueso y podemos estudiar diferentes propiedades biológicas, como puede ser un efecto estimulador del crecimiento, un efecto antioxidante, antiobesogénico o incluso estimulador del sistema inmunitario.
¿La pesca está mejor vista que la acuicultura?
Sí. A la gente le cuesta aún aceptar un producto procedente de la acuicultura por encima del de la pesca. En otros sectores como la ganadería, está más aceptada la crianza de animales en espacios limitados. Nosotros queremos realizar un producto más saludable y conseguir alimentos más seguros y más sostenibles. Nos gustaría que la sociedad tuviera una mejor visión de la acuicultura.
¿Los peces criados en la acuicultura tienen un mayor control y calidad?
Hasta ahora, muchos de los piensos que se hacían eran con harina de pescado y aceite de pescado, pero ya se utilizan muchos ingredientes alternativos. Los animales criados en la acuicultura son más seguros de ingerir y, en muchos casos, están más protegidos y controlados que los peces que se pescan en el mar. Con los aditivos en los que estamos trabajando, buscamos además que sean más nutritivos y potenciar la economía circular. Intentamos mejorar la sostenibilidad de los piensos para peces.
¿En qué estado se encuentra su tecnología?
En el ámbito científico lo tenemos consolidado. Ya hemos realizado algunos tests, la metodología funciona y puede tener diferentes usos o aplicaciones. Por tanto, tenemos la tecnología y tiene capacidad de ampliación dependiendo del ámbito en el que transferimos la investigación. Ahora estamos intentando identificar a los posibles clientes, aunque ya hemos hecho alguna prueba con empresas colaboradoras. La idea que tenemos es centrarnos en empresas de aditivos, empresas productoras de piensos o incluso la industria farmacéutica.
Más sobre las doctoras Encarnación Capilla e Isabel Navarro…
¿El mejor invento de la historia?
Dra. Capilla: Las vacunas
Dra. Navarro: La luz eléctrica
¿Qué les gustaría ver en un futuro?
Un planeta más sostenible y socialmente más seguro.
¿Un avance del futuro que les dé miedo?
Dra. Capilla: Me asusta el rápido avance de las nuevas tecnologías.
Dra. Navarro: El mal uso de las tecnologías y el control que puedan hacer de la población.
¿Un referente?
Dra. Capilla: Mi madre, que siempre me ha apoyado.
Dra. Navarro: Mercè Durfort, que fue profesora de la Universidad de Barcelona.
La transferencia es importante por…
Hacer llegar la investigación a la sociedad y poder mejorarla.