Karim Lekadir «La IA podría ayudar a detectar antes casos de cáncer y a administrar tratamientos más efectivos»
Karim Lekadir es el coordinador de EuCanImage, un proyecto financiado con 10 millones de euros por la Comisión Europea y en el que participan 19 instituciones europeas y una de Estados Unidos. El proyecto pretende desarrollar una plataforma de imágenes de cáncer que contribuirá a mejorar el potencial de la inteligencia artificial y de la medicina de precisión en oncología.
¿De qué trata el proyecto?
Los objetivos por los que nace el proyecto son dos. Por una parte, tratar de construir una plataforma para facilitar la recogida de imágenes sobre cáncer e información clínica sobre la enfermedad. Esta parte, que corresponde a los macrodatos, o big data, ayudará en el posterior desarrollo de la inteligencia artificial de la plataforma. Una vez esté completada la parte del big data desarrollaremos diferentes técnicas de IA para construir soluciones que puedan ayudar en la detección del cáncer, la elección de tratamientos y el seguimiento de pacientes con cáncer.
¿Para qué servirán los datos recogidos?
Una vez acabado el proyecto la plataforma seguirá viva para que los profesionales puedan buscar y consultar toda la información sobre los datos que haya allí. También será posible que la gente continúe añadiendo datos. De esta manera, la plataforma continuará creciendo una vez acabado el proyecto para que haya más datos y se puedan seguir compartiendo.
Todos los días entran en los hospitales pacientes que generan datos. Una vez el paciente se cura, estos datos se guardan en un cajón y se quedan “dormidos”. Lo que nos gustaría es que esos datos estuvieran “despiertos” y se pudieran seguir utilizando para, como en nuestro caso, desarrollar inteligencia artificial. La inteligencia artificial mejora cuantos más datos tiene, así que es importante crear una cultura en la que la gente quiera compartir datos y esté motivada para ello.
La recogida de imágenes y datos la haremos a través de seis o siete instituciones que forman parte del proyecto. En Catalunya, por ejemplo, serán el Hospital Clínic de Barcelona y el Parc Taulí de Sabadell, pero también contaremos con imágenes de instituciones de Italia, Suecia, Polonia, Lituania, los Estados Unidos y los Países Bajos. Cuando hayamos recogido toda esta información la subiremos a la plataforma, y a partir de ahí comenzaremos con el desarrollo de la inteligencia artificial.
¿De qué manera entra la inteligencia artificial en el proyecto?
Queremos conseguir tres cosas. Primero, que la inteligencia artificial responda a necesidades clínicas. Para ello, vamos a trabajar con médicos y especialistas, que nos dirán qué tipo de IA necesitan. Esta parte es muy importante, porque si desarrollas inteligencia artificial únicamente con informáticos, matemáticos, etc., el riesgo de que después no tenga utilidad para los profesionales de la salud es muy alto.
Durante la segunda parte desarrollaremos los métodos de inteligencia artificial dependiendo de los requisitos que nos indique el personal clínico. La tercera parte es también muy importante, ya que tendremos que definir cómo validar y evaluar esos métodos. No es suficiente con decir el porcentaje de precisión que tiene la herramienta, hay que hacer un trabajo mucho más profundo para que, además de ser precisa, tenga otros atributos: que sea equitativa, por ejemplo; que sea igual de efectiva en hombres que en mujeres, en diferentes grupos étnicos, edades, etc. Sabemos que esto no siempre sucede.
¿Cómo podría mejora esta tecnología la vida de los pacientes de cáncer?
El cáncer es una enfermedad compleja que muchas veces no se consigue detectar a tiempo. Nuestra hipótesis es que utilizando el poder de las máquinas, las matemáticas, estadísticas, etc., se pueda analizar una cantidad muy grande de datos que las personas por si solas no pueden analizar. El ser humano puede mirar una sola imagen, y a veces ni siquiera puede ver todo lo que hay en esa imagen. La máquina, sin embargo, puede analizar miles de casos y dar una respuesta.
Con los tratamientos pasa lo mismo. En la actualidad hay diferentes tratamientos para el cáncer, y los médicos eligen el tratamiento basándose en su experiencia y en algunos estudios. Si podemos tener una gran base de datos de pacientes pasados y ver qué tratamientos han tenido éxito y cuáles no, en el futuro cuando un llegue nuevo paciente la máquina podrá compararlo con datos pasados e identificar características comunes para aplicarle un tratamiento u otro dependiendo de las probabilidades de curación.
¿Cómo se coordina un proyecto con tantos participantes?
Es muy importante tener un buen equipo y, en particular, un buen jefe de proyecto. Nosotros en eso tenemos mucha suerte. También es importante redactar el proyecto con gente de calidad y que tenga experiencia y motivación por el mismo, que ame lo que hace. Para mí personalmente es algo que forma parte de mi vida y que hago con pasión. Por último, es necesario saber organizarse y comunicarse bien. Nosotros tenemos diferentes grupos de trabajo entre los que nos comunicamos semanalmente y que están organizados en diferentes temáticas. Es un trabajo muy interesante y amplio, pero que con un buen equipo se puede llevar a cabo sin problema. Además, tengo la suerte de haber sido coordinador de otros proyectos, y eso también ayuda. Dentro de la Universidad nos ayuda mucho el equipo de la Fundación Bosch i Gimpera, que tiene mucha experiencia con proyectos europeos.
¿Cuál cree que es la importancia de la transferencia de conocimiento?
En este caso en concreto no transferir el proyecto sería un fracaso. La transferencia es importante para el paciente, pero para poder llegar hasta él es importante cumplir diferentes fases: requisitos clínicos, legales, éticos, etc. Nosotros trabajamos desde el principio en estos aspectos para asegurarnos de que el proyecto podrá llegar a los pacientes. No tendría sentido desarrollar una plataforma de estas características sin tener en cuenta esos aspectos. Creemos que las empresas e instituciones son importantes en este proceso, y por eso contamos con varias empresas en el proyecto. También es importante que los datos que recojamos sigan estando vivos después de que el proyecto finalice, para que otras empresas e investigadores puedan evaluar o desarrollar nuevas tecnologías y soluciones a partir de lo que ya existe.
Más sobre Karim Lekadir
El mejor invento o avance de la historia: la agricultura, hace más de 11.000 años.
Un avance o invento del futuro que le dé miedo: que la inteligencia artificial esté más presente en la sociedad que la inteligencia humana.
Qué le gustaría ver en un futuro: que se redujera la desigualdad, porque muchas cosas de las que hacemos a menudo solo benefician a una parte de la población mundial. La investigación debería hacerse con el objetivo de crear más igualdad, y eso es lo que me gustaría ver.
La FBG es…
Hay gente que se queja a veces de la administración en las universidades, pero para nosotros como grupo de investigación la FBG es muy profesional y nos facilita mucho la vida. Tenemos varios proyectos abiertos, y con la FBG es muy fácil llevarlo todo a cabo. ¡Estoy muy impresionado y soy un fan de la FBG!