Estela Martín Badosa «El mundo de la transferencia es bastante satisfactorio una vez te adentras en él»
Estela Martín Badosa forma parte del grupo de investigación ‘Optical Trapping Lab – Grupo de Biofotónica’ (BiOPT) de la Facultad de Física de la UB. Su proyecto para desarrollar una tecnología de proyección láser holográfica ha recibido una ayuda Fondo de Valorización (FVal), del programa Fondo para el Impulso a la Innovación (F2i), de 25.000 euros.
¿De qué trata el proyecto?
Lo que nosotros pretendemos es crear un sistema de proyección de imágenes de altísima calidad con luz láser en color que tenga menos limitaciones en cuanto a la cantidad de luz que pueda proyectar. Si podemos conseguir imágenes más luminosas, podremos hacerlas más grandes. Respecto a los sistemas comerciales actuales, nuestra tecnología es completamente distinta. Nosotros no ponemos una imagen para luego proyectarla, sino que conseguimos crearla a través de un holograma que permite reconstruir la imagen deseada sobre la pantalla de observación. Para ello utilizamos un dispositivo acusto-óptico en el que la propagación de ondas acústicas de un cristal modifica las propiedades de la luz que lo atraviesa de manera muy precisa. Esta tecnología aguanta densidades de potencia más altas que el resto de proyectores comerciales y pensamos que esta es la principal ventaja que ofrece nuestro sistema.
La proyección láser, sin embargo, tiene un problema que facilita el fenómeno de las interferencias derivado de la alta coherencia de este tipo de luz. Si dos puntos vecinos de la imagen interactúan, se produce un ruido que se llama speckle y que crea una especie de granulados más brillantes y más oscuros muy desagradables. Los proyectores láser comerciales lo que hacen es poner un difusor rotatorio para reducir este efecto. En nuestro caso, en cambio, este efecto se ve reducido de manera natural a través de las ondas acústicas. Y esto es una ventaja, sobre todo cuando quieres proyectar directamente una imagen sobre una superficie para hacer, por ejemplo una máscara o una imprimación. Es decir, una proyección donde no haya una pantalla difusora que pueda volver a generar patrones de speckle.
¿A qué tipos de proyecciones iría dirigido?
Nosotros nos hemos centrado en la aplicación de los proyectores porque vemos que es un mercado muy grande. Realmente estamos compitiendo en un campo en el que hay mucho dinero detrás y creemos que podríamos ofrecer una tecnología alternativa. Pero la proyección de imágenes láser se utiliza en muchos más ámbitos, como el marcado (de ropa, por ejemplo). Creo que en este sector también podemos competir, porque nuestro sistema permite generar imágenes mucho más complejas, de muy alta calidad y de manera más rápida.
¿En qué momento se encuentra el proyecto?
Ahora mismo tenemos un prototipo en blanco y negro y con imágenes pequeñas. Durante este próximo año lo que queremos hacer es montar el sistema de color y añadirle un obturador muy rápido para evitar el solapamiento entre señales consecutivas y poder así aumentar la velocidad de refresco del dispositivo. Son dos mejoras que parecen pequeñas, pero que tecnológicamente tienen su dificultad. El proceso natural sería pedir luego una ayuda Semilla o una ayuda Producto de la Generalitat de Catalunya, que ya hemos tenido en el pasado en otros proyectos, y avanzar hacia la consecución de un posible proyecto comercial o hacia la licencia de una patente.
¿Cómo utilizarán el dinero del F2I?
El dinero del F2I lo estamos invirtiendo principalmente en la contratación de Dorian Treptow, que es el especialista que tiene los conocimientos para poder hacer avanzar esta tecnología. Aprovecho para decir que muchas veces es difícil conseguir financiación para pagar a la gente que tiene que hacer el trabajo. También destinaremos una pequeña parte a la compra de material, ya que tenemos bastante de proyectos relacionados con la misma idea, pero para otras aplicaciones como la microscopía.
¿Qué importancia tiene la transferencia de conocimiento?
Considero que es esencial que el dinero público que se invierte en nosotros –en espacios, equipamientos, proyectos de investigación, sueldos, etc.– retornen a la sociedad. Ahora, durante la pandemia, se está viendo lo importante que es esto. La ciencia básica es necesaria para generar nuevo conocimiento, y también creo que es muy conveniente que la investigación llegue a la sociedad a través de cosas que puedan resultarle útiles. De la transferencia creo que se habla mucho en España, pero pienso que se hace poca y que vamos tarde. Yo misma, cuando empecé, no tenía interés en la transferencia, pero una vez te adentras en ella, es bastante alentadora y satisfactoria.
También soy crítica con el poco reconocimiento que tiene el personal investigador que hace transferencia, ya que este trabajo está infravalorado en comparación con una carrera académica más convencional
Más sobre Estela Martín Badosa
El mejor invento de la historia
En mi ámbito creo que el láser es el invento del siglo XX, porque ha revolucionado muchos ámbitos de la ciencia y la tecnología. A nivel histórico, sin embargo, diría que lo es la rueda, porque aún hoy en día con un par de ruedas puedes hacer muchas cosas.
¿Qué le gustaría ver en un futuro?
Me gustaría que cuidáramos más del planeta, que no hubiera tanto consumismo y que la gente fuera más consciente de que los recursos son limitados.
Un avance del futuro que le dé miedo
Me dan miedo dos cosas: que la ingeniería genética permita diseñar humanos a la carta, y que la inteligencia artificial se nos escape de las manos y nos supere. Me da miedo que no sepamos utilizar de manera ética estos avances, que son sumamente importantes y que pueden ayudar mucho a la gente.
Un referente
Agustin-Jean Fresnel. Me sorprende su gran contribución al mundo de la óptica a pesar de que muriera muy joven, y la cantidad de aportaciones que llevan su nombre, como los coeficientes de Fresnel, la difracción de Fresnel o la lente de Fresnel, entre otras muchas.
La FBG es…
Quien nos ayuda a los investigadores a mirar la ciencia desde otro punto de vista. Como anécdota y relacionado con esto, recuerdo que para este proyecto nos reunimos con una persona de la FBG. Nosotros estábamos emocionadísimos con una imagen del detalle de un ojo que habíamos conseguido con un láser y un deflector acusto-óptico. Cuando vieron la imagen en la FBG nos dijeron que era mala y que parecía borrosa. En aquel momento estábamos convencidos de que teníamos entre manos un avance increíble. Pero ahora veo esa imagen que enseñamos y me troncho de risa. Es horrorosa. Y por eso hablo de la otra mirada. Para nosotros en aquel momento aquello era un éxito desde el punto de vista científico, pero desde el punto de vista de la utilidad no lo era. La FBG es quien te dice: “Esto está muy bien, pero ahora haz que funcione”. Y hoy, unos años más tarde, efectivamente tenemos unas imágenes excepcionales.
