Casos de éxito

Un estudio para combatir el sesgo de género en la música clásica en Catalunya

El proyecto fue encargado por la Asociación Catalana de Intérpretes de Música Clásica al Grupo de Investigación en Estudios Culturales y Estadísticos de la UB

¿Cuál es la situación de la música clásica en Catalunya? ¿Cuáles son los gustos musicales del público y de los programadores? ¿Qué sesgo de género existe entre los compositores y los intérpretes? Éstas son algunas de las preguntas que responde el informe encargado por la Asociación Catalana de Intérpretes de Música Clásica (ACIMC) al Grupo de Investigación en Estudios Culturales y Estadísticos (RESCUE) de la Universidad de Barcelona. Las principales investigadoras del estudio son la Dra. Magda Polo, profesora titular del Departamento de Historia del Arte, y la Dra. Arlinda Garcia, profesora titular del Departamento de Geografía de la Facultad de Geografía e Historia de la UB.

La investigación surgió a raíz del interés de la ACIMC de tener una radiografía real del estado de la música clásica en Catalunya que permitiera conocer de primera mano las debilidades del sector y corregir y mejorar determinadas decisiones en el ámbito de la política musical.

Para ello, recopilaron, trataron y analizaron datos de más de un millar de conciertos y más de cuatro mil programaciones, y buscaron más de un millar de intérpretes para saber qué instrumento tocaban y en qué tipo de formación actuaban en 2021. De este modo, construyeron una metodología, unas explotaciones y unas reflexiones propias, sin ningún precedente ni en Catalunya ni en el resto de Europa.

La conclusión más relevante que se puede extraer de este estudio es que existen dos sesgos importantes: el territorial y el de género. Magda Polo, una de las autoras del informe, destaca que “es necesario que haya equipamientos para la programación de música clásica repartidos de manera equitativa por todo el territorio catalán, y también hay que incrementar la participación de las mujeres en la creatividad y en la interpretación musical”.

Y es que la investigación alerta de que la presencia de compositoras catalanas fue de tan sólo el 1,7% en 2021. Según el estudio, sólo un 0,5% de las obras interpretadas en las programaciones en 2021 tenían una autoría femenina. Por lo que respecta a la programación de autores contemporáneos, sólo un 11,4% eran mujeres.

En cuanto al sesgo territorial, el informe detalla que durante el 2021 siete de cada diez equipamientos dedicados a la música clásica estaban situados en la provincia de Barcelona, y sólo un 0,6% en la de Lleida. Los festivales, por el contrario, estuvieron más repartidos, con el 40,1% en la provincia de Lleida, el 29,9% en la provincia de Barcelona, el 24,8% en la provincia de Girona y el 5,1% en la provincia de Tarragona.

 

Una ayuda al sector

Polo considera que el informe ayudará tanto a los programadores, las salas de conciertos y los equipamientos culturales como a los gestores culturales, las escuelas de música, los conservatorios y los músicos. “En primer lugar, conocerán de forma global los grandes números, pero también sabrán de forma detallada todo lo que se hace en diferentes rincones de Catalunya. En segundo lugar, les facilitará que puedan promover nuevas políticas musicales fundamentadas en datos reales. Y, en tercer lugar, les ayudará a buscar la excelencia en la música clásica, a partir de la recuperación de nuestro patrimonio musical y de la potenciación de la composición que se hace en nuestro país actualmente”.

Por otro lado, Polo apunta que existe una diferencia importante entre la situación de la música clásica en Catalunya y la de la mayoría de países europeos. “En Alemania, en Francia, en los Países Bajos o en Italia, por ejemplo, hay una programación estable mucho más rica, más equipamientos y más oferta de música clásica diversa. Además, los intérpretes tienen mejores situaciones laborales, y también se estimulan y promueven las obras de nueva creación. En Catalunya, en cambio, por norma general no existen unas buenas condiciones profesionales y laborales, y esperamos que informes como lo que acabamos de hacer lo faciliten. Se trata de ayudar al sector de la música y transferir un conocimiento, que es el que nos ha permitido elaborar este informe sobre la situación de la música clásica en Cataluña durante el 2021”.

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