Desarrollo de un producto para prevenir el deterioro de la fruta de hueso durante la post-cosecha
La FBG ha obtenido una ayuda por valor de 20.000 euros para el proyecto “Desarrollo de RIPLESS, un producto comercial para prevenir el deterioro de la fruta de hueso durante la post-cosecha”, del Dr. Sergi Munné, del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias de la Facultad de Biología de la Universidad de Barcelona (UB).
Según los últimos datos estadísticos de las Naciones Unidas, más del 50% de la población mundial vive en zonas urbanas, un dato que se prevé que aumentará hasta un 68% en 2050. Con la actual migración de personas hacia las ciudades se ha establecido una fuerte desconexión con el entorno agrícola, donde se encuentra la fuente primaria de producción de alimentos. Esto comporta que haya un aumento tanto de la distancia que hay como del tiempo que transcurre entre la producción en los campos y el consumo de los productos en los hogares. Por esta razón, en muchos casos la fruta se cosecha precozmente para que tenga una vida útil más larga, y ello provoca que la fruta tenga una apariencia aceptable en el momento de la distribución pero que no sea de buena calidad, es decir, que no tenga buen gusto, aromas ni propiedades nutricionales, ya que la maduración se ha producido fuera del árbol.
La fruta de hueso, que incluye los albaricoques, las nectarinas, las ciruelas, los melocotones y las cerezas, es un ejemplo de fruta muy perecedera y con una estacionalidad muy marcada que determina un consumo rápido. La pérdida de calidad en la fruta de hueso durante la post-cosecha se relaciona con una pérdida de turgencia, sabor y aroma, que provoca una pérdida de aceptación en el mercado. Actualmente existen varias técnicas para mejorar la vida útil de las frutas. Una de las más utilizadas es mantenerlas en condiciones de frío en cámaras durante su almacenamiento, transporte y suministro. El principal problema es que la fruta de hueso es muy susceptible al estrés por frío en la post-cosecha. Una alternativa a este método es la aplicación de embalajes con atmósfera modificada, pero el hecho de que la mayoría de atmósferas modificadas se apliquen en envases de plástico comporta un consumo innecesario de este material, con un impacto ambiental igual o superior al que supone el despilfarro de la fruta. Por otra parte, como alternativa libre de plásticos también se ha usado el revestimiento de la fruta sana con una capa semipermeable. Por desgracia, algunos de estos revestimientos han sido considerados nocivos para los consumidores, y esto los ha hecho evolucionar hacia los revestimientos comestibles. Sin embargo, la utilización de estos productos todavía no es una realidad, porque algunos de ellos modifican el sabor de la fruta y requieren tecnología y máquinas adicionales para su utilización.
Es por ello que el principal objetivo de este proyecto es testar y desarrollar un producto a base de antioxidantes naturales que sea fácil de aplicar para una gran variedad de consumidores, sin necesidad de maquinaria complementaria, y que permita prevenir el deterioro de la fruta de hueso durante la post-cosecha para evitar el desperdicio de la fruta. El desarrollo de este producto tendría por lo tanto una gran repercusión tanto desde el punto de vista económico y social como desde el punto de vista medioambiental, sobre todo teniendo en cuenta el marco del cambio global, que hace que haya que aprovechar al máximo los recursos de que se dispone para asegurar el abastecimiento de comida seguro y saludable a toda la población.
El proyecto, con número de expediente 2019-LLAV-00022, ha sido otorgado por la AGAUR en la modalidad “Ayudas Semilla para proyectos innovadores con potencial de incorporación al sector productivo”, y está financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional de la Unión Europea en el marco del programa operativo FEDER de Catalunya 2014-2020.